2.Viaje de Italia a Brasil (1893)

Giovanni Colpo Zampeze nació en Conco en 1866.- Su padre se llamaba Giovanni Colpo y su madre Antonia Zampeze.- El pequeño pueblo medieval de Conco se aferra a las verdes montañas al interior de la zona de Vicenza, al centro de la región del Veneto.- Sus calles empedradas fueron testigos de los primeros años de vida de Giovanni, su padre era agricultor y su hijo heredó el oficio.- Cuando ya era un hombre de 20 años, el trabajo duro del campo lo había formado como una persona perseverante y esforzada.- Era alto, de tez clara, cabello castaño y profundos ojos azules, de cuerpo fornido.- Por esos años conoció a Rosario Corona Tasca Merlo, originaria de la localidad de Varorina, lugar cercano a Conco, en la misma región.- Ella era menuda, de pelo oscuro y tez clara, su cuerpo pequeño sin embargo guardaba una fuerza que la vida colocaría a prueba a cada instante.-
Era una época dura para los agricultores, la modernización del campo italiano ya había comenzado, la introducción de maquinaria que reemplazaba la mano de obra y los cambios sociales que se habían iniciado con la unificación del reino de Italia hace unos cuantos años, hacía cada día mas difícil la vida de estos pequeños agricultores.- Muchos trabajaban bajo el sistema de arriendo de tierras el cual pagaban con parte de la cosecha, pero la competencia con los grandes hacendados los dejaba fuera de poder negociar su producción y año tras año la pobreza se hacía mas fuerte.-
En 1888 nació el primer hijo, Marco, quién sin saberlo encabezaba una larga lista de hermanos, los cuales vendrían en los próximos 20 años.-
En medio de esta situación de pobreza y al borde de la hambruna, aparecieron algunos personajes que contaban historias de maravillas y riquezas que se podían conseguir al otro lado del mundo, en América.-
Los agentes del gobierno brasilero, recorrían los villorrios y campos, hablando de esas maravillas que esperaban a todos aquellos que se atrevieran con la aventura de cruzar el Atlántico.-
Al futuro colono se le ofrecía, pasaje en barco en tercera clase, contrato de trabajo por los primeros años, terrenos que debían limpiar y cultivar, para más tarde pagar a un valor muy menor.- También estaba el ofrecimiento de trabajar contratado en los cafetales a cambio de un salario, vivienda y comida.-
Se daba preferencia a los grupos familiares, lo cual hizo que en muchos lugares el viaje fuera emprendido por pueblos completos y zonas agrícolas quedarán despobladas.-
Giovanni y su naciente familia sufrían los embates del invierno, junto a Corona se sumaron a muchos de su pueblo y lo primero fue sacar pasaporte, para lo cual viajaron en diciembre de 1882 a la localidad de Bassano, donde el Real Comisario, representante del gobierno Italiano les entregó el documento.- Ya habían dado el primer paso.-
Luego vino la organización del viaje, El jefe de familia firmó un contrato con el agente que representaba al gobierno de Brasil, ante el cual se comprometían a presentarse en el puerto de Génova y formalizar allí su calidad de colonos, recibir su pasaje para el barco y la información del destino al cual llegarían.-
Los preparativos en el pueblo fueron muy rápido, se vendió lo que se pudo, a la casa se le puso candado pues nadie compraba propiedades, todos se marchaban hacia América.- La emigración dejó a Conco casi despoblado, muchas familias partieron completas e incluso hasta el sacerdote del pueblo partió junto a sus feligreses.-
El viaje se realizó en carreta para las mujeres, los niños y los pocos bienes que podían llevar, también cargaban alimentos, pues sabían que estos eran escasos y caros en este trayecto hasta Génova.- Los hombres viajaban a caballos, pocos poseían ese animal, la gran mayoría viajo a pie.- Este viaje tomaba varios días y hasta semanas, pero la primera meta era cercana aunque no por eso amigable y conocida.-
El invierno arreciaba, el norte de Italia era azotado por las tempestades de nieve y hielo.-
La mayoría de los colonos eran personas del interior del territorio italiano, nunca habían visto el mar, menos un barco de las dimensiones que tenían los vapores de carga y pasajeros.-
Una vez que arribaban a la zona portuaria, tenían que ir a las oficinas del Agente de Colonización y allí les daban la fecha del zarpe, los pasajes y la información del lugar al cual irían a establecerse en Brasil.- La espera del zarpe, hacía que las familias de emigrantes buscaran refugio en hospederías, las cuales lucraban elevando los precios de alojamiento y comida.- Las condiciones de hacinamientos eran propicias para contraer enfermedades.-
La prostitución y los bares clandestinos daban origen a tugurios que florecían al amparo de oscuros personajes que manejaban los contactos para facilitar el enganche de colonos libres, inventar familias y antecedentes que avalaran la moral necesaria para ser embarcados.-
El embarque era confuso, jamás se habían subido a un barco, no sabían leer y hablaban dialecto, lo cual les hacía depender de personas que se ofrecían para ayudarlos y cuyo único fin era robarles sus ahorros y pertenencias de valor.-
Una vez instalados a bordo, venían a dimensionar que estarían casi un mes en ese camarote y que las emociones de la partida, poco a poco se diluían dando paso a la nostalgia, la incertidumbre y el miedo a lo desconocido.-
Desde la cubierta, Giovanni, Rosario Corona y el pequeño Marco que ya contaba 4 años, veían alejarse la costa, “La Lanterna” el faro de Génova en la salida del puerto les daba la despedida, ninguno volvería a esa tierra.-
El viaje se realizaba en tercera clase, camarotes estrechos, oscuros, húmedos, con condiciones higiénicas precarias, muchas veces compartiendo cubierta con animales domésticos.- La comida a bordo era monótona, basada en cereales, legumbres y carne seca, la ausencia de vegetales y fruta fresca provocaba dolencias que hacían el viaje interminable.- Los que fallecían a bordo, eran sepultados en el mar.-
Se navegaba primero por el mar Mediterráneo, pasando frente a Gibraltar y de allí entraban al océano Atlántico para enfilar hacia el hemisferio sur.-
Cuando el buen tiempo acompañaba la travesía, los hombres subían a cubierta y las mujeres y niños quedaban en los camarotes.- Los últimos días del viaje transcurrían a través de un clima tropical, se cruzaba la imaginaria línea del Ecuador, el intenso calor y la humedad hacía largos los últimos días de la navegación.-
Las mujeres sufrían por las pesadas ropas, los vestidos eran hasta la base del tobillo, hechos de telas gruesas, mucha lana, la ropa interior era ajustada y de varias capas, acostumbraban además usar un chal encima de los hombros, los desmayos eran frecuentes.-
Giovanni y su familia llegaron en 05 de febrero de 1893 a Brasil,
La primera imagen de América fue la Bahía de Guanábana en Río de Janeiro.- El barco se dirigió a la “Ilha das Flores”, lugar habilitado con una hostería para realizar el control de los inmigrantes.- Allí pisaron tierra, un sitio donde las temperaturas llegaban a 40º y donde las palmeras adornaban una construcción levantada con muchos dormitorios, grandes salones y extensos comedores y sobre todo muchos baños, para poder higienizar a cientos y cientos de personas que habían viajado un mes en precarias condiciones.-
Allí cumplían la cuarentena obligatoria, para luego retomar viaje hacia el destino final.-
Luego de cumplido el mencionado periodo de 40 días, el viaje continuaba en barco, viajaron en una nave llamada “Iris” la cual realizaba el servicio de cabotaje bordeando la costa hasta llegar al puerto de Santos, la mayoría de los inmigrantes desembarcaba en este puerto, pues los contratos eran para establecerse en Sao Paulo y sus alrededores, emprendían un viaje en tren hasta la Hostería de Inmigrantes de Sao Paulo.-
Otros siguieron navegando hacia el sur, ingresando al territorio de Río Grande do Sul por la ciudad capital, Porto Alegre.- Allí eran recibidos en una hostería instalada en una antigua construcción colonial ubicada en el centro de esta floreciente ciudad.-
El viaje al interior de la región se iniciaba con una navegación fluvial con la cual se recorrían 100 Km., de allí se pasaba a las carretas tiradas por bueyes, las cuales llevaban las escasas pertenencias, las mujeres y los niños, los hombres viajaban a pie.- Este trayecto en carreta podía ser de 60, 80 o 100 Km., por una senda abierta en la frondosa floresta nativa.-Se llegaba a lo que en el futuro sería el centro administrativo, esperaban a los colonos los “Barracones”, unas extensas construcciones de madera para albergar en forma comunitaria a todas las familias.- Allí estaban los dormitorios y el comedor, todo bajo un mismo techo, a cada familia se le asignaba una habitación que era el dormitorio que ocupaban las mujeres y los niños, los hombres dormía en una cama ubicada frente a la puerta de la habitación en el pasillo.- La cocina era una construcción anexa en un extremo del barracón y en el otro extremo estaban los baños.-
Tres meses después de dejar su natal Conco, Giovanni y su familia estaban en lo que sería su nuevo hogar.-
Brasil en la segunda mitad del siglo XIX dio la libertad a sus esclavos, primero a través de la ley de libertad de vientre, todo ser humano que nace en territorio de Brasil es libre y luego mas tarde ocurrió la abolición definitiva (1888).- La situación generada por la libertad de los esclavos produjo grandes cambios sociales y económicos, pues gran parte de la riqueza se originaba en la agricultura.-
La falta de mano de obra y el deseo de establecer colonias en su extenso territorio, llevaron al estado brasilero a impulsar una campaña de captación de colonos en Europa.-
A Brasil llegaron mas de un millón y medio de italianos en 100 años de emigración, pero entre 1887 y 1902 llegó la gran mayoría, sobre 900 mil.- El 30 % de ese millón y medio, provino del Veneto, la región de Italia que mas emigrantes aportó a Brasil.-
Los habitantes del Veneto hablaban su dialecto y no el italiano, lo cual sin duda generaba problemas de comunicación con otros emigrantes, pero también ayudaba a mantener los lazos sociales y familiares ante las adversidades.-